CHINA APROVECHA SUS DESIERTOS PARA INSTALAR PANELES SOLARES

                                                  Viernes 22 de marzo de 2024

                          

                               Proyecto “Datos del este y computación del oeste”.

Dr. Armando Rojano Uscanga

Para lograr la neutralización de carbono en 2060 y garantizar el desarrollo tecnológico, China aprovecha sus enormes regiones desérticas ubicadas en el oeste del país, y está construyendo una serie de instalaciones generadoras de energía solar y eólica que le permitan alcanzar sus objetivos medioambientales y desarrollar su plan tecnológico “Datos del este y computación del oeste”.

La capacidad de las actuales instalaciones solares y eólicas ubicadas en las áreas desérticas de las provincias occidentales del país, como Xinjiang, Qinghai Gansu, Ningxia y Mongolia Interior alcanza los 600 GW y Pekín busca incrementar su capacidad hasta los 1.200 GW para 2030, cifras muy ambiciosas, si consideramos que, a finales de 2022, Estados Unidos produjo 1.160 GW de energía.

China empezó a aprovechar los desiertos del noroeste en 2021, levantando una instalación de 100 GW y el 30% de las plantas se ubican en el desierto de Gobi. Se acerca así al cumplimiento de su objetivo de carbono dual, pues como principal emisor de CO2 del mundo y mayor consumidor de energía renovable del planeta, tiene dos metas: alcanzar el punto álgido de las emisiones de carbono en 2030 y lograr, en 2060, la neutralidad de carbono.

Esto incrementará la soberanía energética de China, y podrá disponer de grandes reservas de energía sin depender de países externos, eludiendo las sanciones occidentales interrumpen su desarrollo tecnológico chino. Utilizará este nuevo sistema energético para la producción de semiconductores avanzados a partir de microchips de generaciones anteriores, tal y como hizo SMIC con el chip integrado en el Mate 60 Pro de Huawei. El objetivo del proyecto es construir ocho ‘hubs’ computacionales para ampliar la red computacional y de centros de datos a nivel nacional, distribuyéndola por todo el territorio, resolviendo la falta de espacio para construir más centros de datos en las regiones orientales, donde se ubican la mayor parte de estas instalaciones.

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