TAILANDIA SERÁ LA DETROIT ASIÁTICA

Domingo 5 de noviembre de 2023

En la mira Toyota, Mercedes, BMW y automotrices chinas

Dr. Armando Rojano Uscanga

La transición de la combustión interna a los motores eléctricos enfrenta al sector automotriz a cambios nunca imaginados, que los actores tradicionales no podrán superar, ofreciendo una oportunidad a nuevos participantes. Tal es el caso de Tailandia que ha puesto en marcha un ambicioso plan que aprovecha su situación geopolítica y la situación económica de China, para convertirse en el gran referente asiático en la producción de vehículos.

Tailandia ya tiene un lugar entre los grandes productores a nivel mundial. Es la décima potencia mundial con más de 1.883 millones de coches producidos en 2022, habiendo crecido un 11% el año pasado. La industria automotriz representa para Tailandia cerca del 10% del PIB, lo que junto al turismo, marcan su desarrollo económico.

Su gobierno, a través de Narit Therdsteerasukdi, secretario general de la Junta de Inversiones, ha diseñado un plan de «operaciones especiales» destinado a captar las grandes inversiones del sector para convertirse en el país más atractivo para que cualquier automotriz que decida montar una fábrica, aprovechando la reestructuración de la cadena de suministro global, y las tendencias de reubicación y sus bajos salarios.

Reforzaron el plan con una nueva ley del coche eléctrico que incluye recortes de impuestos y subvenciones para las empresas en territorio tailandés, con reducción masiva de los aranceles del 0% al 40% y subsidios de 2.700 euros por coche eléctrico a los compradores, logrando que el 50% de las ventas de coches sea de este tipo. Su objetivo es producir 2,5 millones de coches eléctricos en 2030.