Sábado 3 de mayo de 2025
Pero Trump insiste, alegando que bajará impuestos
Dr. Armando Rojano Uscanga
La Cámara de Comercio de Estados Unidos (USCC por sus siglas en inglés) es un grupo de presión que representa los intereses de numerosos negocios y asociaciones profesionales. No es una agencia del gobierno y está asesorada por especialistas en políticas, lobistas y abogados. Es una organización conservadora que apoya a los candidatos republicanos, y ocasionalmente a demócratas conservadores. Su presupuesto anual que supera al resto de grupos; con 200 millones de dólares, en el que aportan fondos Goldman Sachs, Chevron, Texaco, y Aegon. Fue creada el 22 de abril de 1912 por el presidente Taft para servir de contrapeso al movimiento laborista. A más de 100 años de su creación, la Cámara tiene más de 300,000 negocios como socios directos, y unos 3 millones a través de sus afiliados como las cámaras estatales y de las ciudades. Tiene sucede en Washington D. C.
Precisamente ese organismo conservador, que apoya a los republicanos, le está pidiendo al presidente Donald Trump que levante los aranceles para evitar la recesión, en la que caería su país si en este semestre el Producto Interno Bruto (PIB) vuelve a ser negativo, como el 0.3% del trimestre pasado. Afirman que ha empezado la cuenta atrás para que los aranceles se noten pues los últimos barcos cargados de productos chinos han llegado a los puertos de EEUU y ahora los aranceles del 145% se empezarán a sentir en cada nuevo envío.
Esto lo confirmó el director ejecutivo del Puerto de Los Ángeles, Gene Seroka, en declaraciones a CNN, que los envíos libres de aranceles desde China han terminado de llegar esta semana. La cantidad de barcos contratados para las próximas semanas se ha hundido un 35%, y JPMorgan teme un derrumbe de empresas que solo tienen inventarios para seis a ocho semanas. Cuando se acaben, tendrán que pedir nuevos productos a precios exorbitantes o aceptar las estanterías vacías, mientras buscan reemplazo.
Las empresas empiezan a hacer sus pedidos ahora para la temporada navideña, y un parón en las importaciones en mayo afectaría las ventas en los meses de más consumo del año. Por su parte Trump insiste en que los aranceles van a seguir y que ayudaría a las empresas bajando impuestos. La Cámara sostiene que los aranceles provocarán inflación y escasez en EEUU, con tal de dañar a la economía de China, en una política de “lose-lose” (perder-perder) en que todos pierden.