Jueves 14 de agosto de 2024
Nissan con pintura refrigerante y Toyota con “Tokeneko”
Dr. Armando Rojano Uscanga
La competencia entre los fabricantes de automóviles es tanta, que a falta de novedosas innovaciones buscan ventajas en mejorar sus equipos, como Nissan que está experimentando con una pintura refrigerante reduce el calentamiento del coche, o Toyota que ofrece un adminículo que se derrite cuando el calor es agobiante.
La pintura bajaría el calentamiento externo e interno de los carros, mejorando la eficiencia energética, al reducir el aumento excesivo de la temperatura dentro del vehículo cuando se expone a la luz solar directa, reduce el consumo de combustible y aumenta la autonomía en vehículos eléctricos. Nissan desarrolla el producto junto a Raadi-Cool, empleando tecnología de meta-materiales, que permiten reflejar la radiación solar y emitir calor desde la superficie del vehículo hacia el espacio exterior, reduciendo así la necesidad de usar aire acondicionado para enfriar el interior del automóvil. En la fase de desarrollo, compararon vehículos pintados con esta tecnología con otros con pintura convencional, demostrando una reducción de hasta 12 ºC en la superficie exterior y hasta 5 grados en el interior.
Más modesta, Toyota presentó el proyecto «Tokeneko» para evitar el golpe de calor dentro de los autos durante el verano, después de que una encuesta reveló que el 40% de encuestados estima que se necesitan más de 10 minutos después de detener el aire acondicionado para alcanzar un nivel de advertencia de golpe de calor, pero otros datos muestran que el índice de golpe de calor puede alcanzar niveles peligrosos en tan solo 5 minutos, lo que demuestra una falta de conciencia sobre los riesgos asociados a breves períodos sin ventilación adecuada. Toyota hizo un video ilustrativo titulado «tokeneko», que publicó en su cuenta oficial de X, mostrando una figura en forma de gato derritiéndose a medida que aumenta la temperatura en el interior del vehículo, visualizando así el riesgo de golpes de calor, que afecta más a los niños y las mascotas, cuya temperatura corporal puede aumentar hasta 1,5 veces más que la de los adultos.