Jueves 1 de febrero de 2024
Fabrica el 90% de los chips más avanzados
Dr. Armando Rojano Uscanga
En estos momentos de tensión internacional, está en riesgo la empresa más importante del mundo, Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, como lo reconoció Donald Trump al afirmar que: “Si China toma Taiwán, potencialmente apagará al mundo”. Y es que T.S.M.C., como se le conoce, causaría una depresión global si detuviera la producción, pues de ella dependen los más avanzados smartphones, automóviles, misiles guiados, sistemas de rayos X y resonancias magnéticas, máquinas-robot, etc.
Situada en Hsinchu, Taiwán T.S.M.C. fabrica el 90 por ciento de los chips más avanzados del mundo, en una región amenazada por una invasión de China, lo que después de lo ocurrido en Ucrania con la invasión de Rusia resulta muy probable, si consideramos que inversores como Warren Buffett están vendiendo su participación accionaria. No hay día en que los militares de Taiwán no detecten aviones y buques del Ejército de China cerca de su territorio.
Mark Liu, presidente de T.S.M.C. tampoco lo descarta, pues afirmó que “Cuanto más se habla de silicio, menos racional se vuelve la gente”. Sin embargo, las fábricas de TSMC serían inútiles para los invasores, porque lo acostumbrado en estos casos es destruir todos los sistemas de producción antes de que caigan en manos enemigas. Y no se trata de sistemas convencionales, sino de trabajos que realizan máquinas que miden sus productos en nanómetros (milmillonésimas de metro).
Una invasión china a Taiwán afectaría a la economía mundial, pero también repercutiría en la economía del invasor, que depende de esos chips, por lo que la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, llamó a la industria de los chips su “escudo de silicio” de Taiwán. Esperemos que no se equivoque.