EUROPA SE ACERCA AL EURO DIGITAL

Sábado 21 de octubre de 2023

Llegaría a fines del 2025

Dr. Armando Rojano Uscanga

Todo parece indicar que el Banco Central Europeo (BCE) ha decidido emitir el euro digital, culminando exitosamente su experimento de una moneda en la que pocos creían. Todo está alineado; un uso decreciente del dinero en efectivo en los países desarrollados, una mayor utilización de los pagos electrónicos y la irrupción de las criptomonedas, están llevando a que la banca central se plantee crear divisas digitales que, como el dinero fiduciario (dólar, libra, etc.), estén respaldadas por las entidades monetarias. Otro factor a favor es que las enfermedades como el Covid-19 se contagian por el contacto con las monedas y billetes lo que hizo que bajara la demanda de efectivo a nivel mundial y que se pensara en divisas digitales de los bancos centrales (central bank digital currencies.

Por todo eso el BCE analiza la versión 2.0′ del euro y lo que aportaría a la ciudadanía de la eurozona, formada por 20 de los 27 países de la Unión Europea. El euro sustituyó a las monedas de esos países el 1 de enero de 2002, y menos de dos décadas después, su banco emisor, el BCE, se adaptaría a los tiempos con una versión digital, ya que el efectivo no permite explotar todas las ventajas que ofrece la creciente digitalización de la economía y la sociedad.

El euro digital sería un medio de pago aceptado de forma generalizada en toda la eurozona, al igual que los billetes y monedas, los que será complementario, y ofrecería los servicios básicos gratuitos y fáciles de utilizar de una moneda común, que haría al sistema financiero europeo más independiente de alternativas extranjeras. Se ofrecería la modalidad offline, para hacer pagos en euros digitales sin necesidad de conexión a Internet y que se ofrecería junto con la modalidad online, permitiendo llevar los pagos digitales a zonas geográficas donde actualmente no son una opción.

Respecto a la confidencialidad de las personas que lo usen para pagar., el Eurosistema procesaría los pagos, sin saber quién hay detrás de cada transacción, por lo que el nivel de privacidad de la modalidad offline sería como la del efectivo, siendo una experiencia equivalente a la que tenemos hoy con los pagos electrónicos: los usuarios accederían al euro digital a través de las entidades financieras y solo estas tendrían visibilidad sobre su información personal. El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidió pasar a la siguiente fase en la creación y puesta en marcha del euro digital, y el próximo 1 de noviembre empezará la fase de preparación, de dos años.